Por Javier Góngora
En febrero de 2021, en el programa de radio Bordear el desierto, los derechos a través de la frontera, Vianett Medina entrevistó a Soraya Vázquez1, abogada especialista en derechos humanos. En el diálogo, la también activista compartió algunas de las razones de la demora en la resolución de las solicitudes de asilo político por parte de migrantes hacia Estados Unidos y la condición de los migrantes en espera en México. Aquí se presenta una síntesis.
Para explicar la razón por la que el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, está demorando en atender y resolver los casos de los migrantes que solicitan asilo político, Vázquez comenta lo siguiente:
Me parece que están siendo ya conscientes y realistas de que las cosas no las van a poder transformar de un día para otro; es muchísimo lo que hay que modificar. Entonces están diciendo: no podemos transformar esto de un día para otro y están pidiendo paciencia. Están pidiendo, por ejemplo, que los migrantes en Centroamérica no salgan, no vengan ahorita, no es el momento, no estamos preparados todavía (Vázquez, 2021).
El furor que muchos migrantes experimentaron con la llegada de Biden a la Casa Blanca se ha extinguido, pues de acuerdo con Soraya “Primero tendrán que resolver toda la situación de las miles de personas que ya están en la frontera, antes de estar recibiendo nuevos casos. Esto es lo que han comentado” (Vázquez, 2021). No obstante “La situación que viven las familias en la frontera ya es insostenible” (Vázquez, 2021).
Por ello, según Soraya Vázquez, no solo el gobierno estadounidense, sino también el gobierno mexicano tiene una responsabilidad directa ante la situación de los miles de migrantes varados en la frontera:
En esta espera [a la que están forzados los migrantes] el gobierno mexicano tendría que reaccionar para atender verdaderamente con un programa humanitario a todas estas familias que tienen más de un año esperando en la frontera sin ningún apoyo institucional (Vázquez, 2021).
En este contexto la labor de las organizaciones civiles que promueven los derechos de los y las migrantes se torna cada vez más necesaria. Es indispensable que la sociedad misma tome conciencia de su responsabilidad en este tema. Por ello:
Las organizaciones hemos pedido que el gobierno emita un programa emergente de regularización temporal masiva (…) para todas aquellas personas que se quedaron atrapadas en la frontera. A la par que un programa de atención humanitaria, donde se pueda resolver, por lo menos, las necesidades básicas de mucha gente que está en una situación muy precaria (Vázquez, 2021).
La población de migrantes deportados y con ello, atrapados en las fronteras del norte de México, está lejos de ser un grupo homogéneo. Como Soraya lo detalla a continuación:
Han sido retornadas [a México] bajo este programa (MPP)2, alrededor de sesenta mil personas que están distribuidas en distintas ciudades fronterizas. La mayoría son centroamericanos: Honduras ocupa los primeros lugares, Guatemala, El Salvador; pero también tenemos venezolanos, cubanos, y hay una población extra continental, por ejemplo, hay gente de África (Vázquez, 2021).
Los MPP cuando son retornados a México reciben una forma migratoria múltiple y una CURP provisional y la autoridad dice: con esto puedes trabajar; pero la realidad es que ningún empleador les acepta ese pedacito de papel, que es la Forma Migratoria Múltiple, como un permiso de trabajo(…). Entonces esa situación los coloca en una condición muy vulnerable, porque no pueden encontrar trabajo, por lo tanto no reciben un ingreso, por lo tanto no pueden resolver sus necesidades (Vázquez, 2021).
Estos grupos de migrantes sin duda están indefensos ante una situación que los sobrepasa. Por ello la entrevistada no duda en presentar cuáles son algunas de las situaciones de riesgo que sufren estas personas:
Están expuestos a ser captados por el crimen organizado. En su desesperación también [son propensos] a acceder a recibir servicios de traficantes de personas. [Sin embargo] En Camargo se encontraron diecinueve cuerpos calcinados, y son migrantes que en la desesperación deciden utilizar a los famosos polleros, pero al final de cuentas están poniendo en riesgo su vida, como ya lo vemos (Vázquez, 2021).
El no generar condiciones dignas de estancia, [a los migrantes] les genera mucha desesperación y ansiedad, entonces buscan cualquier salida rápida. Eso tiene que ver con que México no les está otorgando justamente una estancia en condiciones dignas (Vázquez, 2021).
Sin lugar a dudas las políticas migratorias de los países involucrados está lejos de ser perfecta. Por ello, de acuerdo a Soraya Vázquez, la situación de las personas migrantes es un tema pendiente, no solo para los gobiernos implicados, sino también para las sociedades donde estos grupos de migrantes se encuentran. Sociedad y gobierno han de unir esfuerzos para transformar esta realidad negativa de las personas, que sin culpa buscan un futuro mejor.
Notas
1Activista social pro derechos de los migrantes y directora de la Asociación Civil al Otro Lado.
2Protocolo de Protección de Migrantes.
Referencia
Vázquez, S. (2021). La situación de los migrantes en la Frontera, en el contexto de la llegada de Biden a la Casa Blanca. / Entrevista por Vianett Medina. Programa de radio Bordear el Desierto: Los derechos humanos a través de la frontera. Disponible en: https://soundcloud.com/losderechoshumanos/030221a?si=c99aff5983d0498d9777c45013816710
La Lengua de Sor Juana es una revista bimestral del Centro de Posgrado y Estudios Sor Juana ©. Av. Las Palmas 4394, Las Palmas, 22106 Tijuana.