Ensalada de rábanos

Ensalada de rábanos

Por Nonancy Estrada

Su papá le pidió que trajera una jarra de agua fresca y algo para invitarle al joven. Él había traído rábanos como obsequio y su padre le sugirió preparara algo con eso. Se fue a la cocina, se colocó el mandil azul cielo, llenó una olla grande de agua y la puso a hervir. En una tina remojó tres mazos de rábanos y comenzó a tallarlos para retirarles la tierra húmeda que delataba su reciente cosecha, con sus manos quitó los tallos y siguió enjuagándolos hasta que el agua salió limpia. 

Mientras lavaba una tabla canturreaba dichosa por la oportunidad que podría llegar a tener. Puso la tabla en la mesa y cortó los extremos de los rábanos para luego hacerlos rodajas, con una técnica veloz y precisa. Metió las rodajas en agua hirviendo sabiendo que tendría que esperar una hora para que se les bajara lo amargo y quedaran tiernitos.

Tenía un cuchillo especial, era alargado y fino, perfecto para hacer cortes delgados, su papá se lo trajo de un viaje a la ciudad, lo sacó e hizo láminas de acitrón tan delgadas que podía verse a través de ellas, recordó que necesitaba meter una pera bergamota a hervir y lo hizo junto a los rábanos.  Peló una granada, cortó rajitas de tornachiles y mitades de uvas. Recordó lo que tenía en la lumbre y corrió a retirarlos para dejarlos bajo el chorro de agua hasta que se pusieran frescos.

Montar el plato era su parte favorita, toda la receta dependía de qué tan sabroso podría verse. Cortó pera en cuadritos y la mezcló junto con rábanos, uvas, granada, otro tanto de pasas, aceitunas y tornachiles; todo a su gusto. En un vaso revolvió aceite, vinagre y azúcar vertiéndolo a la ensalada, mezclando todo. Sirvió en platos blancos, cuidadosa de no salpicarlos y terminó decorando con un poco más de granada, chile y láminas de acitrón. Quería, a través de la comida,  quedarse en su recuerdo.


Bibliografía

Garza Marcué, R. M. y Vázquez Ahumada, C. (2017) mujeres construyendo un mundo: las recetas del Convento de Santa Mónica en Puebla. INAH


La Lengua de Sor Juana es una revista bimestral del Centro de Posgrado y Estudios Sor Juana ©. Av. Las Palmas 4394, Las Palmas, 22106 Tijuana.

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